Delirio y persecución [LIBRE]

**Valentine** Dom Dic 25, 2011 10:20 pm

Las hojas secas apenas y crujían bajo los tacones de las botas de cuero y la menuda figura del sacerdote se movía con agilidad y gracia entre los gruesos troncos de los árboles, prácticamente escabullendose de manera muy eficaz para no quedar a la vista de cualquier par de ojos que afectara su misión.
Cuando sintió la presencia de otro ser se agachó y se ocultó tras uno de esos inmensos árboles. Su respiración era entre cortara pero muy suave, y fue relajándola lo más pronto posible hasta hacerla imperceptible. Una rama seca rompiendose lo impulsó a aferrar su mano a la empuñadura de su cuchillo y agudizar más tanto su vista como sus oídos.

Entonces pudo escuchar la voz de dos hombres, al principio eran sólo murmullos, después ambas voces eran tan claras como si los sujetos estuvieran frente de él.

_ Ésta es tu última oportunidad… dime donde está_

_ … ¿Por qué me has traído aquí?… Quiero volver_

_ ¡Sólo responde a mi pregunta! ¡Maldita sea Dean! _

_ ¡¿Qué - Qué haces?! ¡Thomas! ¡No! _

Era claramente una disputa, no pasó mucho tiempo antes de que Valentine lograra escuchar los gritos y los forcejeos… Parecía algo duro en verdad, pero nada fuera de lo 'normal'. Incluso, se preguntaba si había obrado mal en seguir una pista con tan pocas bases y que sólo había tomado por valida por que fue él mismo quien había escuchado ciertas palabras provenientes de uno de esos hombres y que le habían parecido muy sospechosas.

_ ¡Thomas! Somos amigos… No hagas esto por favor… _

_ ¿Me dirás donde está?_

_ Yo… no puedo… lo jure a mi señor Dios… que jamás develaría el paradero de… _

_ ¡Joder Dean! Es tu dios, no mío… no olvides_

_ ¡Thomas?! _ Justo cuando Valentine daba por fracasada esa 'misión' la voz de ese hombre de repente salió en una especie de chillido incrédulo, así como después empezó a gritar muchos cuestionamientos hacia ese dichoso Thomas.

No era su problema… pero no podía dejar que esos dos se mataran sólo por… Un grito le indicó que era momento actuar. Salió de detrás del árbol y enseguida sus ojos buscaron al par de hombres. Que sorpresa se llevó al ver a uno de ellos tirado en el suelo llorando y desangrandose mientras que el otro estaba sobre él mordiendo su cuello y agarrando con un par de garras que se iban incrustando más en la piel del otro.

Valentine corrió hacia ellos, apartando con una patada a la criatura y sin darle oportunidad de defenderse se abalanzó nuevamente sobre la bestia dándole otra patada y luego un golpe a la mandíbula. El hombre lobo soltó un golpe con su garra, mas sólo rasgó apenas las ropas gruesas del sacerdote. Al ganar algo de distancia Valentine observó que la criatura no tenía brillo en sus ojos, algo alarmado alzó la mirada y pudo ver que era noche de luna llena… Maldijo y luego volvió a ver al hombre lobo, que nuevamente se abalanzaba sobre aquel que una vez fue su amigo. El sacerdote tomó una roca y se la arrojó, cuando la bestia fue tras de él sacó su cuchillo y trató de herirlo, logrando hasta después de un rato de forcejear. La bestia, herida y confundida huyó hacía una parte más oscura.

El rubio se apresuró hacia el hombre que se encontraba aún vivo, pero demasiado débil y empeorando. Valentine se quitó la capa y la capa e hizo presión sobre la herida más grande en el cuello. El hombre sangraba por la boca y trataba de hablar.

_ No hable más hombre iluso… descansa… _

_ … yo… nh… tengo… ghf… mie…do…_

_ No temas, protegiste tu palabra, honraste tu juramento… _ Incluso si el mismo Valentine era muy incrédulo ante la existencia de Dios, jamás se tentaba a la hora de confortar a otros con la existencia del mismo. Y al parecer sus palabras dieron frutos. El hombre pronto comenzó a calmarse…

_ Dame… tu cuchillo_

Observó con extrañeza al hombre… pero no lo dudo y sacó su cuchillo de su estuche, entregándoselo. El hombre lo sostuvo y sonrió al ver el grabado que tenía en la empuñadura. 'Libertad al hombre'

_ Mátame _ Dijo éste. _ Sino lo haces… Seré como él…

_ Aún hay una vida después de-

_ ¡No! No lo entiendes… _ Sorprendentemente el hombre comenzaba a hablar mejor. Valentine alzó su capa ensangrentada viendo como la herida era cada vez menos profunda. Era… la primera vez que veía a uno en plena transformación. El hombre, Dean, también lo estaba notando. notaba como había un deje de fuera en sus manos una vez más, pero sobre todo notaba que su cuerpo se llenaba de un coraje… indescriptible. Tomó el cuchillo del sacerdote y él mismo se lo enterró en el pecho una y otra vez ante los ojos del sacerdote y por último se cortó el cuello de lado a lado con una sonrisa dibujada en los labios.

Valentine negó con la cabeza tomando el cuchillo de entre las frías manos y levantandose de inmediato. En ese mismo momento una sombra se movió entre los árboles frente de él. Después otra se movió detrás haciendo que volteara.
Estaba siendo acechado. Dio una última mirada al cuerpo inerte y luego de tomar su capa comenzó a correr hacia algún punto ciego que sus acechadores no hubieran cubierto, y aunque en un principio todo parecía ir bien, los lobos no tardaron en alcanzarlo e interseptarlo.

Eran un par de lobos ligeramente más grandes que los lobos que solían verse a las orillas del bosque…. pero eran distintos. No eran hombres lobos era un hecho, pero probablemente si estaban asociados a ellos pues no tardo en percatarse de que esas bestias estaban esperando las ordenes de alguien para abalanzarse sobre él.